miércoles, 11 de marzo de 2009

Te dejas llevar por la corriente. Navegas el río que navegan. Recorres el camino recorrido. Bajas la vista. Deseas perderte. Apresuras el paso. Te pierdes entre la gente. No cuestionas sus actos. Actúas bajo sus influencias. No preguntas. Callas. Apareces en la escena establecida. En la obstrucción marcada. No meditas. No buscas. Solo sigues al cardume. Te dejas llevar por el caudal. Aceptas sin más. Sin reproches. Sin inquietudes. Ni dudas. Aceptas. Finges gustarte. Finges estar bien. Te escondes estúpidamente bajo el llamado anonimato. Temeroso. Débil. Cobardemente.